Cada vez está más de moda comparar directamente estos nuevos dispositivos con los de Apple, que es la que popularizó el mercado de los tablets y smartphones para el público masivo. Samsung es la más popular en este terreno, con anuncios que se burlan directamente de la filosofía Apple.

Amazon no ha entrado en el terreno de la chanza más descarada, pero sí compara los precios y las posibilidades. La compañía pone sobre la mesa que Kindle Fire, su tablet Android, cuesta 200 dólares, y que su eReader más básico vale 79 dólares. Dos unidades del primer modelo y una del segundo, juntas, cuestan 479. El iPad 2 más básic, 499 dólares.

En el anuncio, un hombre habla con una mujer sobre la lectura en dispositivos portátiles y ella destaca la buena experiencia de leer con la pantalla de tinta electrónica aún con luz exterior, en comparación con un tablet. Él replica que para ver películas o navegar por Internet, eso sí, hace falta otro tipo de dispositivo, como el suyo.

Su contertulia responde que para eso tienen sus dos niños sendos Kindle Fire, con los que están jugando con videojuegos y viendo películas tan felices. Él, asombrado, le deja caer que todo eso le ha debido salir muy caro. Ella, satisfecha, le responde que todo le ha costado aún más barato que a él su dispositivo, que es a todas luces un iPad, aunque no se menciona nombre alguno.

Lo que no menciona la guapa protagonista del anuncio es los estudios que indican que la satisfacción de los usuarios de un iPad es siempre superior a la de los usuarios de Kindle Fire. Tampoco habla de las capacidades superiores del ‘hardware’ del tablet de Apple, como la cámara, el tamaño de la pantalla o la mayor cantidad de memoria interna.

Fuente: eleconomista.es





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