Llega el verano, y pese a las promesas y buenos deseos de comienzos del año para ir al gimnasio y perder peso, aquí estamos con la misma barriguita de siempre. Pero nunca está de más empezar a cuidarse, especialmente ahora que el tiempo acompaña para ir a correr o hacer algo de deporte por la mañana a primera hora o a última hora de la tarde.

Pero además de practicar algo de deporte, también es fundamental cuidar las comidas. Y aquí os dejamos algunos consejos para tratar de comer algo mejor y tratar de ahorrar algunos kilillos de más al cuerpo. ¡Comenzamos!

1. Lo primero es mantener la nevera y la despensa a base de alimentos sanos. Evita tener en la nevera alimentos que no nos convienen en absoluto, y que en un momento de debilidad pueden hacernos caer en la tentación.

2. Come despacio. Tu cuerpo hará mejor la digestión, y además sentirás sensación de hartazgo antes que sin comes a toda prisa como si fuera el último plato de comida que quedara en el mundo. ¿La explicación? La señal de que estamos saciados le cuesta llegar al cerebro, que es el que da la orden al cuerpo de dejar de comer, en torno a los 20 minutos. Si tu comes deprisa, te habrás acabado todas las existencias antes de que la orden llegue a su destino.

3. Realiza cinco comidas al día. Uno de los principales fallos que se cometen a menudo cuando se quiere perder es saltarse alguna comida. De hecho, hay mucha gente que piesa que saltándose el desayuno, el almuerzo o la merienda, se pierde algo al ingerir menos cantidad de comida. Craso error. El desayuno es la principal comida del día, ya que nos ayuda a mantener el ritmo desde por la mañana, y además los alimentos que ingerimos en el desayuno se pierden fácilmente tras una larga jornada de trabajo. Por otro lado, el almuerzo y la merienda nos ayudan a mitigar el hambre y evitan que lleguemos a la comida o cena más hambrientos que el perro del hortelano, devorando todo lo que se pone a nuesro alcance. Además, es fundamental mantener ciertos horarios para las comidas, ya que nos ayudará a ser más regulares y a no picar entre horas.

 

4. Bebe agua de forma abundante. El agua es vital para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Beber dos litros de agua al día nos ayuda a depurar nuestro cuerpo eliminando toxinas, y además nos ayuda a sentirnos más saciados.

5. Evita picar entre horas. Y si lo haces, procura que sean alimentos sanos. Fruta, tomatitos cherry, queso fresco o bocadillines integrales con jamón en lugar de recurrir a las chuches, bollería industrial o el embutido.

Fuente: hombresconEstilo.com





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