Como millones de otras personas, recibí un correo electrónico de Google esta mañana. Fue titulado “Cambios en la Política de privacidad de Google y los Términos de Servicio”. La primera frase describe la intención de los cambios como acortar las políticas en un 60, y mejorar su legibilidad.

A continuación hay una explicación más. El correo electrónico continúa afirmando que Google no ha cambiado su política de privacidad y no venderemos nuestra información personal a terceros “Nuestra política de privacidad permanecen sin cambios”. Entonces, ¿qué está pasando aquí?

Esta es una semana donde Sheryl Sandberg, Director de Operaciones de Facebook, habló en la conferencia DLD Hubert Burda en Munich y dijo que estábamos en medio de tres tendencias. En primer lugar, una tendencia “del anonimato a la verdadera identidad”. En segundo lugar, una tendencia de la “sabiduría de las multitudes a la sabiduría de los amigos”, y en tercer lugar, una tendencia “de ser receptores de información a los organismos de radiodifusión de la información”. Se trataba de un reflexivo y al mismo tiempo un discurso polémico, un discurso con un fuerte punto de vista. Al pensar en los cambios de política de privacidad de Google que ayuda a escuchar las observaciones de Sheryl y reflexionar sobre el contexto.

Facebook dice que la Internet como un mecanismo de recuperación de información pura está muerta. Que el “ReadWrite” web que se inició ya en el sitio web hosting barato en 1998, ha sustituido completamente la web de sólo lectura. Que el autor identificable ha sustituido el anonimato. Nos están transmitiendo y que son identificables. Que leer lo que dicen sus amigos es ahora dominante en ese mundo. Facebook prevé un futuro en el que todas las transmisiones seral leidas de casi todo a casi todo el mundo.

Problema de Google.

En ese mundo, el algoritmo de Google PageRank es muy desfasado. Promueve las páginas basadas en el número de enlaces a la misma. Hoy en día, las páginas ya no son la unidad de la publicación. Elementos mucho más pequeños que una página de dominar nuestros sentidos. Y los mensajes más pequeños se producen en gran cantidad y en tiempo real. Por lo tanto las señales que hacen algo relevante ahora han cambiado. Facebook (y Twitter) dan montones de señales. Google, hasta hace poco, no tenía ninguno.

Solución de Google.

Los cambios en los términos y condiciones de Google se centran principalmente en proporcionar a la empresa con un conjunto integrado de datos capaz de alimentar las señales de que lo que es y no es relevante para cada uno de nosotros en nuestra búsqueda de la gran cantidad de datos producidos por el segundo. En ese sentido, no sólo es el movimiento estratégico correcto, es una cuestión de vida o muerte. Google está haciendo un pivote, con el fin de seguir siendo relevante. Es difícil no estar de acuerdo en que sea necesario. También parece claro que la empresa está no lo esta haciendo intencionalmente “mal”. Sin embargo, hay un dilema tanto para Google y Facebook a medida que avanzamos por el camino de “todos somos difusores”. ¿Cómo pueden recoger las señales que alimentan la toma de decisiones sin conocimiento del usuario acerca de lo que es privado, de forma selectiva compartida o pública?

Nosotros, el pueblo!

Hay una reacción discernible y creciente en contra de ambos Facebook el paradigma de compartir y los nuevos cambios de política de Google. Mientras que el reparto implícito, o como lo llama Sheryl Sandberg, la radiodifusión, sustituye a compartir consciente, están creciendo desilusionado con Facebook tomarse libertades con su comportamiento. El mismo instinto hace que muchas personas se centran en la intención de asumir malo detrás de las modificaciones de Google. La difusión de nuestra “verdadera identidad” es algo que nadie quiere por defecto, y muchos no lo quieren bajo ningún concepto.

Privacidad se está convirtiendo en un problema del producto, no sólo una cuestión de política.

En los últimos defensores de la privacidad en Internet se centraron principalmente en la intimidad como una cuestión política, y el vestíbulo de privacidad se hizo principalmente por profesionales de la política. En el período transcurrido desde 2011 la conferencia F8 de Facebook, hemos visto que los consumidores comienzan a tener fuertes opiniones sobre el uso de sus datos. La semana pasada se ha acelerado esta tendencia. Los gerentes de producto ahora tenemos que pensar largo y tendido acerca de los supuestos incorporados en sus productos y asegurarse de que están sirviendo a los consumidores no sólo de palabra sino de hecho. Los consumidores están en una punta de inflexión en no tolerar todo incluido las decisiones de política por los proveedores de servicios.

Google y Facebook están entre la espada y la pared.

Hay un gran problema estructural de Google y Facebook, ya que contemplamos las consecuencias producto de las reacciones del consumidor a su roadmap de producto. En una plataforma centralizada que es muy difícil de crear y fácil de entender los controles que dan a cada usuario la capacidad de control, a un nivel granular, lo que comparten y con quién. Cambios de gran política, como la que salió de F8 y que ahora estamos viendo de Google, tienden a asumir todos los usuarios son los mismos y quieren la misma cosa.

En realidad, los usuarios son más complejos. Que tal vez quiera guardar un vídeo privado a un espacio de almacenamiento personal en un momento, algo que compartir con un selecto grupo de amigos un momento, y transmitir algo al mundo cinco minutos después. La infraestructura de servicios web que Facebook y Google se basan en no permitir que tan fácilmente los usuarios controles su preferencias sin imponer también un serio esfuerzo. Como todos sabemos, que conduce a los usuarios a seguir con la configuración predeterminada la mayoría del tiempo.

Así, a pesar de las buenas intenciones de los equipos de ambas compañías, una talla única para todas las decisiones es la norma.

¿Móviles para el rescate?

Los problemas estructurales por lo general requieren soluciones estructurales. Lo que los consumidores están pidiendo es un mundo en el que todos sabemos lo que estamos compartiendo y con quién, pero donde no tenemos que hacer una enorme cantidad de trabajo para lograr eso. Círculos de Google parece ser un guiño en este sentido como son los grupos de Facebook. Pero tampoco es muy fácil o suficientemente integrados en el flujo de los productos para resolver realmente el problema. Ambos requieren una carga administrativa enorme.

Como ya argumenté a principios de esta semana la difusión de los teléfonos inteligentes pueden ser parte de la solución aquí. Cientos de millones de consumidores están llevando en torno a conectar y cámaras de vídeo con las listas de contactos en la libreta de direcciones, a menudo ya organizados en grupos significativos. Descentralización de la toma de decisiones es muy fácil cuando hay clientes descentralizada de software bajo el control único de cada usuario. La capacidad de ser privada en un momento, compartir selectivamente la siguiente y luego transmitido públicamente a los pocos minutos es fácil de lograr en esta arquitectura de software descentralizado. Y los proveedores de servicio puedan convertirse en actores malos, simplemente porque no poseen la información o el gráfico social plena. La nube se convierte en un medio de entrega de mensajes a los teléfonos y el lugar donde guardamos nuestros medios de comunicación. Pero no es el lugar en el que necesitamos confiar para que tome decisiones acerca de lo que se comparte y con quién.

Software puede realmente reflejar los deseos de cada ser humano en cada momento en este mundo. No podía ser estructuralmente más diferente de los últimos 10 años de servicios web centralizados.

¿Qué viene después?

Productos tendrán que ser cada vez más humanos, y cada vez más móviles. Privacidad puede desaparecer generando un problema si eso ocurre. Todas las decisiones sobre donde los datos pueden viajar serán decididos por los usuarios, cada vez que se ingresen los datos. Todos vamos a ser capaces de ser privados, con participación selectiva o elegir para transmitir con relativa facilidad.

Nos estamos moviendo a un período en el que se considera intrusiva y no deseada, si nuestros proveedores de servicios no tienen ningún punto de vista sobre nuestro comportamiento para compartir. “Sólo confía en nosotros”, no será necesario. La captura de momentos en la vida, con la elección de si desea compartir, y lo más importante, con quién compartirlo, estará en manos de cada individuo. El proveedor de servicios se limitará a ejecutar la voluntad del usuario. Si lo piensas bien, es algo así como lo que los proveedores de servicios de correo electrónico en la actualidad. No puedo esperar.





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