Bill Gates ha vuelto a sacar el tema de su relación con Steve Jobs en un par de entrevistas que le han realizado recientemente en ABC News y The Telegraph, señalando que las rivalidades y altibajos entre ellos se suavizaron cuando pasó a centrarse en la Fundación Bill y Melinda Gates en torno a 2007. “Steve y yo nos encontramos en un evento conjunto y él no pudo ser más simpático… Pasé algún tiempo con él en su último año.”

Cuando el cofundador de Microsoft descubrió la gravedad del estado de salud de Jobs, le escribió una carta:

“Le dije a Steve que debía de sentirse muy bien por todo lo que había logrado y la compañía que había levantado. Escribí acerca de sus hijos, a los cuales había conocido… No había que hacer las paces. Nosotros no estábamos en guerra. Hemos creado grandes productos, y la competencia siempre ha sido algo positivo. No había nada que perdonar.”

Después de que Jobs muriese, Gates recibió una llamada de Laurene Powell, la esposa de Jobs, en la que hablaron entre otras cosas acerca de la biografía que había realizado Walter Isaacson, y en la que su marido no hablaba precisamente bien de su durante tanto tiempo rival.

“Me dijo: “Mira, esta biografía no refleja la realidad sobre el mutuo respeto que sentíais“ y me contó que agradeció mi carta y la guardó junto a su cama.”

Gates también ha comentado lo que sintió cuando Jobs murió, resaltando su trabajo y definiéndolo como un “genio increíble”:

   “Bueno, es muy extraño tener a alguien tan vibrante y que marco una diferencia tan enorme y ha sido… una especie de presencia constante, y que muera. Hace que te sientas como ‘Wow, nos estamos haciendo viejos’. Espero tener todavía un poco de tiempo para poder continuar con lo que estoy haciendo ahora, con mi trabajo filantrópico. (…) Te recuerda que tienes que escoger las cosas importantes, porque sólo tienes un tiempo limitado.”

    “Steve era un genio increíble que contribuyó en gran medida a su campo. Tuvimos períodos, como cuando se lanzaron los primeros Macintosh, que incluso teníamos a más gente que él trabajando en ellos. Y luego nos convertimos en competidores. Los ordenadores personales en los que trabajé consiguieron una cuota de mercado enormemente mayor a la de Apple hasta los últimos cinco o seis años, cuando Steve hizo un trabajo extraordinario con los Mac, el iPhone y el iPad que funcionó extremadamente bien. Es todo un logro y disfrutamos del trabajo de cada uno… Pasó mucho tiempo compitiendo conmigo. Hubo un montón de ocasiones en que Steve dijo duras críticas sobre mí. Si tomas los ejemplos más ásperos puedes llegar a ver una especie de letanía.”

Afortunadamente, al final, la última conversación que mantuvieron los dos gigantes de Silicon Valley fue notablemente amistosa:

   “Siempre hemos disfrutando hablando el uno con el otro. Me echaba algunas cosas en cara, ya sabes, algunas cosas estimulantes. Hablamos acerca de las otras compañías que han llegado con el tiempo. Hablamos de nuestras familias y lo afortunados que hemos sido los dos con las mujeres con las que nos casamos. Fue una gran y relajada conversación.”

Fuente: aplesfera.com





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